A través de cartas y postales escritas por nuestros colaboradores de todo el país, el pasado 11 de febrero nuestros pacientes hospitalizados de las Clínicas Farallones y Palma Real de CHRISTUS SINERGIA recibieron mensajes de aliento y bendiciones como parte de la celebración de la Jornada de Oración Mundial por el Enfermo, un día y actividad cargada de amor y las mejores energías para transmitirles fuerza y esperanza durante el tratamiento de sus necesidades en salud, recordándoles que nunca están solos.

La Jornada inició a primera hora con una hermosa eucaristía transmitida a través de nuestra página de Facebook, en la que se celebró la vida de todos aquellos que batallan actualmente contra una enfermedad y bajo la guía de nuestro capellán, elevamos nuestra fe para rogar por la salud y bienestar de cada una de las personas que visitan nuestras sedes y clínicas.

Nuestros capellanes junto al personal de Psicología y Trabajo Social de nuestras Clínicas fueron los encargados visitar a los pacientes fuera de aislamiento para ofrecerles consuelo y paz en sus habitaciones en las que se encuentran hospitalizados. Mientras que las auxiliares y profesionales de enfermería de las áreas de aislamiento fueron las personas encargadas de ser esa voz de aliento para nuestros pacientes aislados durante este día pues, dándonos cuenta de que solo basta con compartir unas cálidas palabras y una sonrisa para identificar en el otro la humanidad y la bondad que nos unen en la adversidad.

Este año la pandemia significó grandes dificultades, no solo a las personas que fueron contagiadas por el virus, sino también en sus familiares y cuidadores que tuvieron que lidiar con la frustración de no poder acompañar a su ser querido en un momento de incertidumbre, razón por la cual, la conmemoración de esta Jornada fue una oportunidad para recordar lo que nos une y así hacernos más fuertes entre todos.

La Jornada de Oración Mundial por el Enfermo se realizó por primera vez en 1993 después de que el Papa Juan Pablo II la instituyera para aumentar la sensibilidad y el compromiso que tenemos con la asistencia de los enfermos. Esta es una fecha para ejercer nuestra fe y ofrecer al prójimo nuestra solidaridad.

En honor a todos los pacientes que han pasado por CHRISTUS SINERGIA, elevamos una oración que les llene de fe y humildad.